Para llegar al destino de Harry Potter tiene para defenderse de los enjambres de murciélagos. Sentado en un palo de escoba, Harry apunta y dispara a las criaturas voladoras, pero para llegar a ellos, no es sencillo, constantemente esquivar. No está de más recoger toda la oferta de bono: Bolas de dragón mágicos, cabezas, calabazas y un reloj de arena.