El camello salvaje que conociste en un oasis desierto le pidió ayuda inmediatamente en el camello que la ahorra para sus crías. Su único camello desapareció. Ella lo trajo al riego y le permitió correr un poco cerca de la costa del embalse, y ella decidió relajarse. Mamá dormitaba un poco, y cuando se despertó, no encontró al niño cerca. No respondió a la llamada, y el camello comenzó a entrar en pánico. Calma a la mamá molesta y realiza la búsqueda, la obtendrás mejor de lo que tiene en el camello que se queda para sus crías.