Una niña curiosa fue al bosque a recoger setas y encontró un micelio inusual en Mushroom House Escape. Los champiñones eran enormes, no se podían cortar y poner en una cesta. Abriendo la boca sorprendida, la niña comenzó a caminar entre los hongos y de repente se encontró con una verdadera casa de hongos. No, pensando en las consecuencias, la heroína abrió la puerta y entró. La puerta se cerró de golpe detrás de ella y la niña quedó atrapada. Empezó a golpear la puerta, pero ésta no cedió. Solo se puede abrir desde el exterior con una llave especial, que encontrarás en Mushroom House Escape.