Cupcakes, pasteles, croissants y otros pasteles rosados y esponjosos que ninguna persona normal puede rechazar llenarán el campo de juego en Cake Maine. Esta es una verdadera manía por los manjares y te invitas a sumergirte de lleno en ella, incluso para aquellos que están en una dieta eterna. No te amenazan con kilos de más, porque todos nuestros pasteles están hechos. Si miras de cerca, verás objetos redondos negros entre los pasteles y estos no son más que bombas reales. Son simplemente necesarios, porque el objetivo del juego es conseguir el máximo de puntos. Las bombas destruyen tanto la fila como la vertical en la que se encuentran. Si aparece una calavera negra no la toques, de lo contrario bloqueará un grupo de elementos y no podrás moverlos por un tiempo. Disfruta de los dulces y juega.