El enorme volcán se despertó de nuevo y liberó de su voluminoso cráter una gran cantidad de lava rojo anaranjado. Magma se extendió por todos lados y aquí y allá se cortaron pequeños pedazos de él. Entonces había una bola de magma llamada Enkid. El bebé aprende sobre el mundo, baja la montaña y explora el área. Él tiene la capacidad de cambiar la forma y puede pasar de un bulto común a una pelota o cualquier otra forma. A medida que el camino va, cambiará su forma repetidamente, hasta que madure. Presta atención a sus aventuras, para recorrer todos los caminos de la evolución. Es necesario evitar los fósiles con un origen magmático; de lo contrario, habrá que repetir el camino del renacimiento.