La criatura Jelly se hizo fuerte en su propio mundo, el héroe decidió buscar otros lugares para vivir y darse cuenta de su potencial. En lugar de liberar al habitante por los cuatro costados, fue atraído a una trampa y encarcelado en un calabozo lleno de todo tipo de piezas terribles para torturarlo. Desde el techo cuelgan bolas redondas de acero con púas, y el piso se pincha con picos agudos. El infeliz prisionero no se desesperaba, iba a salir y usar sus habilidades para escapar de las leyes de la gravedad. Él es capaz de mantenerse en los techos y así evitar las trampas mortales. Pero a gran velocidad no es fácil reaccionar a los obstáculos, pero esto lo ayudará en el juego StickyMan Run.